Cuando vayas a La Habana por Juan José Garrido Koechlin
Natural del Perú. Es profesor de la Escuela Económica Austriaca de la Universidad de Ciencias Aplicadas (Perú), Director del Instituto Acción, investigador académico y columnista. Obtuvo de St. Edwards University una Maestría de Administración de Negocios (MBA).
El último número de la revista Foreign Policy destaca un debate sobre la situación de la isla cubana ante la inminente muerte del dictador Fidel Castro[1] . La polémica, entre el socialista Ignacio Ramonet y el liberal Alberto Montaner, más que una pila de asombrosa información, es una manifestación de lo que todos ya sabemos: de Castro solo se polemiza apasionadamente. No se puede ser equilibrado. O se le abomina, o se le idolatra. Y debería ser así. A la libertad se le defiende o se le conspira. Los que optamos por lo primero solo podemos hacerlo con el apasionamiento con el que conspiran lo segundos.
Las cifras de Castro hablan por sí mismas: 31, 173 muertos y más de medio millón de torturados[2] , su fortuna se calcula en los cientos y miles de millones (Forbes estima la fortuna del dictador en $900 millones, basado en un análisis sobre la red de poder y acceso económico que el mismo ostenta sobre diversos negocios y conglomerados estatales[3] ; sin embargo, la CIA –utilizando una metodología muy similar- la calcula en más de $2100 millones[4] ), y ostenta al menos 59 residencias y 10 cotos de caza[5], en el segundo país menos libre del mundo –solo superado por Corea del Norte[6] -. En resumen: es un dictador asesino, corrupto, amoral.
Sus prácticas político-económicas, fundadas en el planteamiento marxista, se pueden reducir en las palabras de Darío Machado[7] : "el socialismo, en tanto acción superadora, debe fundarse en el predominio de la propiedad social socialista, en el trabajo en beneficio de todos, en el colectivismo, en un concepto socialista del bienestar y de la justicia social, en la cooperación y en la solidaridad". En otras palabras, el individuo es un medio para los fines de otros; por ello, su libertad, el derecho a la vida y a la mejora de la calidad de la misma, a la propiedad y a los frutos de la misma, no existen. Son enajenables; o lo que es lo mismo, son pasivos de robo, saqueo, hurto. Tal cual actúan Chávez y Morales. El resultado de dichas prácticas: el empobrecimiento generalizado de la isla. Al resumen anterior, añadir: empobrecedor.
Empero, para sus defensores –aparentemente- la vida es un juego de suma cero: ¡Castro ha matado, pero Bush también! Como si los crímenes se pudieran justificar alumbrando los crímenes de otro; ¡Para qué quiere
fortuna, si tiene todo lo que quiere! Cuando lo cierto y concreto es que la tiene, la ostenta, y la disfruta, más allá de lo que psicológicamente produzca dicha realidad en la mente de sus defensores...la prueba que el sol ilumina es que –justamente- ilumina, tal cual la prueba de la fortuna del dictador es que la ostenta día a día, con sus coches, mujeres, mansiones, vicios, y etcéteras; ¡Pero el modelo cubano funciona, hay baja mortalidad infantil y casi nulo analfabetismo! Como si eso compensara la pérdida de las libertades individuales, más allá de que son realmente objetivos de propaganda, realizados con la única intención de poder defender el modelo opresivo con algún indicador positivo.
Como dicho: con Castro, solo existen posiciones apasionadas. Los místicos dirán que algo bueno existe en su legado. Si la vida es eso, buscar cualquier dato o posición subjetiva que permita apalancar defensas sobre basuras de este tipo, entonces encontrarán justificaciones para cualquier robo, cualquier asesinato, o cualquier otro delito. Algunos creemos que existen cuestiones primeras, aquellas que son del tipo dicotómico (e.g. negro o blanco); para mí, la libertad es una de ellas.
[1] Ver: http://www.fp-es.org/index.asp
[2] Ver documental "Los Muertos de Castro" en http://www.cubademocraciayvida.org y el recuento de cifras en el Miami Herald del 23 de Abril del 2006.
[3] Ver: http://www.forbes.com/2006/05/04/rich-kings-dictators_cz_lk_0504royals.html
[4] Ver: http://www.contactomagazine.com/castrofortuna072506.htm
[5] Ver: http://www.cubademocraciayvida.org/...
[6] Ver: http://www.heritage.org/research/features/index/...
[7] Ver: http://www.cubasocialista.cu/texto/cs0249.htm
www.institutoaccion.com