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"Raúl Castro recibía la cocaína y Fidel estaba al tanto" reitera Popeye
Jhon Jairo Velásquez Vásquez, alias Popeye, fué secretario privado y jefe de seguridad del extinto narcotraficante Pablo Escobar Gaviria, ha declarado y reiterado en multiples ocaciones, la vinculación del régimen Castrocomunista con el Cartel de Medellín en las figuras de Raúl Castro y su hermano Fidel.
Video "Las confesiones de Popeye" de Rafael Poveda TV TV Libertad aboga por la libertad y la democracia para Cuba y el mundo, dentro de un marco cultural que sea consecuente con su fomento y preservación. https://patriademarti.com https://www.facebook.com/PatriadeMarti
El gobierno de Costa Rica desarticuló una estructura criminal que enviaba droga a Cuba. La red utilizó una doble vía para traficar drogas a la Mayor de las Antillas para abastecer el mercado turístico de narcomenudeo de la isla y lavar las ganancias en dólares en Costa Rica.
Drogas en Cuba 2: Cubanos se inician en la droga entre los 10 y los 15 años
Costa Rica desarticuló una operación de drogas, destinadas a ser consumidas por el turismo en Cuba. A raíz de ello, Martí Noticias devela el bajo mundo del consumo y tráfico de drogas en la isla. Jóvenes adictos cuentan sus historias.
Cuba en los Papeles de Panamá: Gobierno usó a Mossack Fonseca para burlar el embargo
Al menos 25 compañías en paraísos fiscales tenían vínculos con Cuba
Cuba estuvo en el centro de un esquema de exportación de petróleo ruso que involucra a compañía libanesa
Hermano del yerno de Raúl Castro aparece en los registros filtrados
El gobierno cubano utilizó a la firma Mossack Fonseca (MF) para crear sociedades anónimas en paraísos fiscales que le habrían permitido realizar operaciones comerciales al margen del embargo estadounidense.
El Nuevo Herald identificó al menos 25 compañías registradas en Bahamas, Panamá y las Islas Vírgenes Británicas vinculadas a Cuba. Algunos de los mensajes encontrados en los archivos de los llamados Papeles de Panamá se remontan a principios de la década del 90, cuando Cuba tuvo que afrontar una dura crisis económica tras perder a su principal socio comercial y benefactor, la Unión Soviética. Pero la relación con algunas de estas compañías se mantuvo hasta fechas muy recientes.
Al frente de una de estas compañías se encontraba el hermano del todopoderoso general Luis Alberto Rodríguez López Calleja, yerno del gobernante cubano Raúl Castro y presidente del Grupo de Administración Empresarial S.A. (GAESA) de las Fuerzas Armadas.
Los Papeles de Panamá, una de las mayores filtraciones en la historia, contiene los archivos de Mossack Fonseca, bufete basado en Panamá pero con oficinas en 33 ciudades de otros países. Algunos de estos archivos revelan detalles poco conocidos de los manejos económicos del gobierno cubano en el exterior así como de las compañías extranjeras que hacen negocios con el gobierno de La Habana.
En asociación con McClatchy y el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación(ICIJ), el Nuevo Herald obtuvo acceso a millones de documentos filtrados de la firma panameña.
RUSIA- LÍBANO-LA HABANA
Una de las tramas más intrigantes en los registros ubica a Cuba en el centro de un esquema de exportación de petróleo ruso a América Latina a través de una compañía offshore registrada en Panamá por la familia Bassatne, que controla BB Energy, un conglomerado de compañías fundado en Líbano en 1937 dedicado al comercio de petróleo y sus derivados y que mueve anualmente 16 millones de toneladas métricas de petróleo. Según un reporte de Bloomberg, BB Energy generó en el 2012 ingresos por $10,000 millones.
¿Le sorprende que el gobierno de Cuba haya creado sociedades anónimas en paraísos fiscales que le habrían permitido evadir el embargo?
BB NAft Trading S.A, una compañía incorporada en Panamá con oficina en La Habana y otros países y en la que Jurgen Mossack aparece como directivo, fue creada por la familia Bassatne “para atender, entre otras cosas, sus relaciones con los países latinoamericanos exportadores de petróleo y con Cuba”, según explica el abogado de MF Rigoberto Coronado en un correo electrónico.
La compañía, no obstante, no aparece en la estructura del grupo de empresas controladas por la familia Bassatne, que incluye a BB Energy Trading Ltd, BB Energy Management S.A, BB Energy Holdings NV, B .B. Energy B.V, BB Energy (Asia) Pte Ltd, BB Energy (Gulf) DMCC y BB Holding S.A.L.
La compañía offshore había iniciado los negocios con Cuba en 1992, suministrando petróleo por azúcar hasta el 2001 “por 300 millones de dólares, con facilidades crediticias con un bajo interés”. En el año 1996, continúa Coronado, “se concertó un acuerdo triangular Rusia/Cuba/B.B. Naft Trading, S.A. para la entrega de combustible ruso a otros mercados por varias decenas de millones de US$”.
Uno de esos posibles mercados podría haber sido Ecuador. Una carta de 1998 enviada por una empleada de MF a la Gerencia de Comercio Internacional de Petroecuador, se refiere a documentos enviados por B.B. Naft Trading S.A. “necesarios para el registro de la compañía”. También un fax recibido en el 2005 apunta a un contacto inicial con Petróleos de Venezuela (PDVSA).
La relación del BB Energy Group con Petroecuador parece haber llegado hasta la actualidad.
En febrero de este año, Petroecuador adjudicó a una de las compañías del grupo, BB Energy (Asia) Pte. Ltd., la importación al país de 2,880,000 barriles de diésel. En el 2015, BB Energy ganó en el país el contrato de compraventa de más de tres millones de barriles de nafta.
El esquema de exportación de petróleo ruso, no obstante, parece haber sido afectado por los acuerdos entre Cuba y Venezuela para el intercambio de petróleo por servicios médicos y la compañía amplió el espectro de sus actividades en Cuba, para incluir en el 2007 el “suministro de piezas de repuestos y baterías para automóviles y camiones, botas de trabajo, maquinaria agrícola, material de ferretería por USD 5.3 millones”.
Los registros de una reunión en Dubai en marzo del 2011, revelan la decisión de reducir significativamente el capital de B.B. Naft Trading de $8 millones en manos de BB Energy Holdings NV, a un millón cincuenta mil. Riad Bassatne y su hijo Wael quedaron como accionistas principales de las acciones remanentes. Instrucciones al respecto fueron enviadas por Iulia Ispas, asesora legal de BB Energy Trading Ltd.
Los correos electrónicos intercambiados con los abogados de Mossack Fonseca también apuntan a operaciones de la compañía en Siria e Irak.
Uno de los abogados de BB Naft Trading S.A, Noureddine Kabalan, solicitó en abril del 2008 a Mossack Fonseca que elaborara un poder de representación (POA) para que “la persona empoderada estuviera autorizada a firmar en nombre de la compañía en Siria e Irak transacciones específicas”.
Un reporte de Reuters indica que en el 2011, la compañía matriz BB Energy continuaba enviando petróleo a Siria. El Global Policy Forum, una ONG que monitorea el trabajo de las Naciones Unidas y los gestores de políticas, incluye en un informe del 2004 a esa compañía como una de las beneficiarias de los llamados “sobornos de petróleo” que repartió el líder iraquí Saddam Hussein para reclutar ayuda en la debilitación de las sanciones internacionales contra Iraq.
Hasta abril del 2016, la compañía B.B. Naft Trading S.A se mantenía activa en los registros de las compañías extranjeras radicadas en Cuba con Riad Bassatne como su representante y dirección en: Centro De Negocios Miramar, 5ta Ave. E/ 76 Y 78, Ofic. 310. Edif. Santiago De Cuba. Miramar Playa.
En 2014, BB Energy Group registró a través de un bufete una compañía de responsabilidad limitada en Texas: BB Energy Usa LLC. La dirección de correo postal de la compañía es la misma que la de BB Energy Trading Ltd: 140 Brompton Road, London, SW3 1HY, United Kingdom.
De acuerdo con Peter Quinter -quien hasta muy recientemente fungió como presidente de la Sección de Derecho Internacional de la Asociación de Abogados de la Florida y es experto en las leyes del embargo- en general las leyes del embargo impiden que compañías en Estados Unidos realicen negocios con Cuba, directa o indirectamente (por ejemplo a través de una offshore), a menos que sean transacciones autorizadas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro o el Buró de Industria y Seguridad (BIS) del Departamento de Comercio.
Wael Bassatne, accionista de B.B. Naft Trading S.A. comentó al Nuevo Herald que, a su juicio, la compañía no habría violado ninguna sanción internacional pues no está registrada en los Estados Unidos ni ha establecido relaciones comerciales con este país. “Todas las demás actividades comerciales no fueron afectadas por ningunas sanciones porque estas regulaciones como tales no existen”, escribió en un correo y añadió que “México, Canadá y la Unión Europea emitieron leyes prohibiendo a sus nacionales y compañías cumplir con las sanciones de Estados Unidos”.
En los múltiples correos y documentos de la firma MF queda documentada la relación de B.B. Naft Trading S.A. con el grupo BB. Energy a través de los años.
Por ejemplo, en 2003, B.B. Naft Trading assume la responsabilidad de garante y asumir las obligaciones por un préstamo que obtuvo BB Energy (Asia) Pte Ltd del Standard Chartered Bank de Singapur. Las instrucciones de los accionistas de BB Naft Trading S.A. están fechadas y firmadas en Beirut pero el contrato como garante está firmado por abogados y verificado por la oficina en Grecia (Marrousi) del banco BNP Paribas.
Una instrucción enviada por el abogado Kabalan en 2005, indica a MF emitir nuevos certificados de acciones para B.B Naft Trading S.A. pues los originales habían sido vendidos a B.B. Energy Holdings N.V., una compañía públicamente reconocida como parte del grupo de empresas de BB Energy, con sede en Curazao. Los nuevos certificados, repartiendo 800 acciones, debían estar a nombre de 10 miembros de la familia Bassatne, entre ellas 160 acciones para Riad Bassatne.
La página digital del consejo de empresarios libaneses en Cuba, incluye a Riad Bassatne como miembro de la junta directiva y afirma que este es “el Presidente de B.B. Naft Trading y miembro de la Junta Directiva de B.B. Energy”.
Sin embargo, Wael Bassatne aseguró que “no hay relaciones, comerciales o financieras entre B.B. Naft Trading S.A. y el BB Energy Group”. Asimismo, declaró que las actividades llevadas a cabo por la compañía en Cuba y otros países consistían en “la venta de piezas de repuesto y maquinaria agrícola”. El hecho de que la compañía abrió una oficina en Cuba estaría ligado a que ha sido “residente en la Habana junto a su esposa y tres hijos, todos los cuales nacieron en Cuba” y tienen nacionalidad de ese país.
SOCIEDADES SECRETAS
Otros documentos ilustran el complejo entramado de sociedades offshore creadas por el estado cubano para realizar actividades de importación y exportación e inversiones en el extranjero con la ayuda de Mossack Fonseca.
Desde inicios de la década de 1990 y durante las décadas siguientes, el Ministerio de Comercio Exterior de Cuba, a través de la Compañía Panamericana S.A., usó a la firma panameña para incorporar varias compañías secretas en Bahamas, Islas Vírgenes Británicas y Panamá, dedicadas a compraventa de medicamentos, tabaco y alimentos.
El ex director de Compañía Panamericana S.A., José L. Fernández de Cossío Domínguez, figura como director de Miramar Investment Corporation Ltd, Euro Foods Ltd, Racuza S.A, Caribbean Sugar Trader, Mercaria Trading S.A. y Sabradell S.A. Más recientemente y hasta el 2012, Fernández de Cossío fue embajador de Cuba en Japón y luego estuvo asignado a la embajada de Francia como consejero económico.
Diario de Cuba identificó a la directora general de inversión extranjera del Ministerio de Comercio Exterior, Déborah Rivas Saavedra, como otra de las directoras de Racuza, Miramar Investment Corporation Ltd y Caribbean Sugar Trader.
Guillermo Faustino Rodríguez López-Calleja, hermano del general de brigada Luis Alberto Rodríguez López Calleja, a cargo de GAESA, fue nombrado en 1999 director de Pescatlan S.A, otra compañía incorporada por MF en 1991 en las Islas Vírgenes Británicas con un capital inicial de $50,000. Como su nombre lo indica, la compañía estaba relacionada con la actividad pesquera. Una carta enviada a MF en 1997 pedía colaboración para organizar “una operación de pesca en las Islas Turcas y Caicos con botes de pesca con bandera cubana”.
Aunque MF se refería a Pescatlan S.A. como una compañía cubana, y el intercambio de documentos con La Habana así lo demuestran, no aparecen en sus archivos los nombres de los verdaderos dueños de la compañía. En el caso de esta compañía, sus dueños utilizaron un recurso más para esconder su rastro, al solo emitir certificados de acciones “al portador”.
Existen reportes sin confirmar de un reciente divorcio entre Luis Alberto Rodríguez López-Calleja y Deborah Castro Espín, pero él permanece al frente de GAESA y del proyecto de desarrollo insignia del gobierno en el puerto del Mariel. Se estima que los militares cubanos controlan alrededor del 60% de la economía de la isla.
Actualmente, Guillermo F. Rodríguez López-Calleja aparece como el representante de otras siete supuestas sociedades mercantiles extranjeras registradas en Cuba: Acemex Management Company Limited, Caroil Transport Marine Limited, Nautilus Shipping Overseas Corp, Northsouth Maritime Company Limited, Gulf Lake Enterprises Ltd, Acando Shipping Co. Ltd, Gilmar Project Finance Establishment, con distintas direcciones en Miramar y una en La Habana Vieja.
Labiofam S.A, la empresa comercializadora del Grupo Empresarial Labiofam, dedicado a la producción de vacunas, medicamentos y otros productos para el control de vectores, tenía acciones en BioAsia Ltd, una empresa mixta con capital vietnamita y de fondos de inversiones del sur de Asia y el Reino Unido también manejada por MF como agente registrado. El capital inicial de la compañía fue de 10 millones de euros. En el 2009, Labiofam S.A adquirió todas las acciones de BioAsia Ltd. Quien fuera por décadas el presidente de la estatal Labiofam, José Antonio Fraga Castro, sobrino de Fidel y Raúl Castro, decidió jubilarse en el 2014 para evitar ser sancionado por el escándalo de los “perfumes revolucionarios” inspirados en Hugo Chávez y Ernesto Che Guevara.
Poco se sabe dentro de la isla sobre los negocios del estado cubano en el extranjero, pero en un artículo de inicios de la década del 2000, el economista cubano Omar Everleny Villanueva se refirió a la existencia de “más de 100 entidades con participación de capital cubano, constituidas como empresas mixtas o como sucursales de entidades radicadas en la Isla” funcionando en otros países, en renglones como “la construcción, la agricultura, el transporte, alimentación, medicina, minería, finanzas y la ciencia”.
El economista, recientemente despedido de su puesto en el Centro de Estudios de la Economía Cubana, llamaba la atención en su artículo sobre la paradoja de que un país que “carece de capitales para su desarrollo, ha invertido en otros países”. El motivo, aduce, es el embargo estadounidense, que prohíbe “el comercio de EEUU con Cuba, por lo que fue necesario crear una red de empresas en el mundo que almacenaran y comercializaran los productos del mar entre ellos, langostas y camarones”.
“Actualmente por medio de esas empresas se lleva a cabo la exportación de productos de la industria pesquera” afirma y agrega que también se ha creado “una red internacional de empresas, para el almacenamiento y venta de los famosos habanos cubanos”.
Una fuente conocedora del tema pero que prefirió no ser identificada comentó que el gobierno cubano comenzó la incorporación de empresas, barcos y aviones en Panamá y otros países para evitar reclamaciones por juicios en cortes estadounidenses y “burlar el embargo”. Según la fuente, el gobierno cubano también se beneficiaba del anonimato que ofrecen estas compañías inscritas bajo otras jurisdicciones para llevar a cabo transacciones internacionales en dólares, una prohibición clave del embargo que recién fue eliminada en el 2016 por la administración del presidente Barack Obama.
“Cada vez que se valoraba algún producto en dólares, no se podía hacer porque automáticamente los cheques en dólares provenientes de Cuba eran cancelados porque el dólar es la moneda de la Reserva Federal de EEUU, así que había que decirle al comprador que se pagaría en euros en un banco en España, por ejemplo, y se perdía en la conversión de la moneda”, explica.
Estas compañías en el extranjero, “legalmente no son cubanas”, opina la fuente y agrega que esto abría un camino para realizar estas transacciones internacionales en dólares.
Los registros filtrados corroboran la existencia de estas redes internacionales de empresas con participación del estado cubano. Gran parte de la correspondencia con MF concernía a la actualización de registros y directivos de esas compañías, el pago de cuotas y la solicitud de cartas de estados financieros para la apertura de cuentas bancarias o la firma de contratos.
MF fungió como agente registrado de la mayoría de estas compañías y el abogado suizo Albert-Louis Dupont-Willemin aparece como director de varias, entre ellas Miramar Investment Corporation Ltd y Pescatlan S.A. Según una verificación interna en los registros de MS, Dupont-Willemin aparecía como director de cinco sociedades offshore en Panamá, dos en Bahamas, dos en Seychelles y 49 en las Islas Vírgenes Británicas.
En un intercambio de correos en el 2011 entre empleados de All Worlds Food Ltd—basada en el Reino Unido, agente del monopolio estatal cubano Alimport y representante de Euro Foods Ltd—y un empleado del BBVA en ese país, este pregunta por qué los documentos relativos a Miramar Investment Corporation Ltd estaban legalizados en Suiza.
El contador de All Worlds Food, José Da Silva, le contesta: “Desconozco las razones por las que los documentos están certificados por un notario suizo. Tengo entendido que el Sr. Dupont-Willemin es un abogado suizo y creo que es para que los documentos sean más transparentes y confiables. Se asume que las compañías tendrían más confianza en documentos certificados en Suiza que en Cuba”.
El abogado suizo no respondió a la petición de comentario de el Nuevo Herald.
ESTADO CUBANO SE ESCUDÓ TRAS LAS OFFSHORE
El estado cubano utilizó, además, todas las precauciones para esconder su control sobre las compañías offshore mediante la creación de otras sociedades anónimas, cuyo único objetivo era aparecer como sus accionistas.
Tal es el caso de Racuza S.A, incorporada en las Islas Vírgenes Británicas, que tenía todas las acciones de Euro Foods Ltd (registrada en Bahamas), la que a su vez fungía como agente de Alimport, el monopolio estatal de las importaciones y exportaciones de alimentos.
El único accionista de la compañía Resimevis Ltd, cliente de MF desde 1995 y dedicada a “al comercio general de productos y equipos médicos”, era Sabradell S.A., cuyo director era también Cossío. La compañía fue disuelta en el 2008.
Asimismo, la compañía Curtdale Investments Ltd, registrada en las Islas Vírgenes Británicas, solo tenía el próposito de tener las acciones de Ardpoint Company Inc, cuyas subisidiarias eran Altabana S.L y Promotora de Cigarros S.L, dedicadas a la venta de tabaco en Madrid, según indica un correo del 2015. Uno de los directores de Curtdale y Arpoint a partir del 2011, fue Hernán Aguilar Parra, director general del Grupo Empresarial de Tabaco de Cuba (Tabacuba). Aguilar Parra también fue diputado a la Asamblea Nacional.
En ocasiones, la fachada para esconder el vínculo con compañías cubanas no luce demasiado efectiva. El caso más absurdo es el de la sociedad anónima Tecnica Hidraulica S.A., registrada en las Islas Vírgenes. La ausencia de acentos no es un error aquí, pues la diferenciaba de Técnica Hidráulica, S.A., otra sociedad anónima cubana que era su accionista totalitaria, según explicó en un enrevesado correo un abogado cubano de Consultoría Jurídica Internacional, al asumir la administración de la sociedad offshore. Tecnica Hidraulica, sin acentos, fue disuelta en el 2015.
Los esfuerzos para esconder la mano del gobierno cubano tras las compañías secretras muchas veces significaba que funcionarios, abogados y otros empleados estatales podían llegar a aparecer como los beneficiarios efectivos de estas compañías. Una abogada de Panamericana, Katiuska Peñado Moreno, y un ex consejero comercial en la embajada de Cuba en Londres, Alejandro Gutiérrez Madrigal, aparecen como los beneficiarios de $50,000 en acciones de Miramar Investment Corporation Ltd.
La lista de compañías vinculadas al estado cubano o con actividades en Cuba es larga e incluye también a Sanford Management Financial Ltd, Commercial Mercadu S.A. (conectada a Panamericana), Amadis Compañía Naviera S.A, Seagull and Seafoods, S.A., Mavis Group S.A., Octagon Industria Ltd, Travelnet y Venus Associates Inc, entre otras.
La embajada de Cuba en Washington no contestó a una petición de comentario para esta historia.
On May 24, 2016, the Korea Times reported that senior officials from North Korea’s governing Workers’ Party of Korea (WPK) and the Communist Party of Cuba held talks on strengthening ties between Pyongyang and Havana. This meeting followed Cuba’s congratulatory rhetoric toward Kim Jong-un after his re-election during last month’s historic Workers’ Party Congress. That congress was the first such-meeting since 1980.
While relations between North Korea and Cuba have been close since the Cold War, this revelation is an embarrassing blow to the Obama administration’s attempts to normalize relations with Cuba. North Korea’s close ties to Cuba can be explained by a shared normative solidarity against American values and perceived American imperialism. This ideological bond is formed out of historical experience and has occasionally manifested itself in symbolically significant shipments of arms and manufactured goods. These trade linkages persist to this day, despite tightened UN sanctions and strides towards a less confrontational U.S.-Cuba relationship.
North Korea and Cuba: A Cold War-Born Ideological Alliance
Over the past half-century, Cuba has been one of North Korea’s most consistent international allies. This alliance has caused Havana to resist diplomatically recognizing South Korea, despite growing economic cooperation with Seoul. Cuba’s firm pro-Pyongyang stance has deep ideological underpinnings, stemming from both countries’ shared Communist experiences. In 1960, Che Guevara visited North Korea, praising Kim Il-sung’s regime as a model for Fidel Castro’s Cuba to follow.
While both regimes preserved authoritarian systems and the trappings of a planned economy, their ideological synergy did not translate into convergent governance trajectories, as Guevara predicted. As Wilson Center expert James Person argued in a July 2013 BBC article, North Korea wanted to avoid Cuba’s dependency on Soviet weaponry following Khrushchev’s retreat from confrontation during the Cuban Missile Crisis. This resulted in North Korea transitioning toward a military-first policy, to the detriment of the country’s economic development. Meanwhile, despite visiting North Korea in 1986, Fidel Castro avoided creating a cult of personality resembling Pyongyang’s, as he felt that statues erected in his honor were incompatible with the Soviet Marxist-Leninist principles that he adhered to.
Despite their divergent development courses, both countries have remained close allies to this day, and there are signs that the bilateral relationship has strengthened further under Raul Castro’s rule. Panama’s interception of a North Korean ship in 2013 containing Cuban arms concealed under bags of sugar represented the most significant Havana-Pyongyang commercial linkage since the 1980s. Despite Cuban attempts to downplay the controversy, Panama’s foreign minister regarded this action as just part of a much larger Cuba-North Korea arms deal. U.S. Ambassador to the United Nations, Samantha Power, also condemned Cuba for violating international sanctions.
The U.S.-Cuba normalization has done little to shake Cuba’s close ties with North Korea. In March 2015, Cuban Foreign Minister Bruno Rodriguez declared that Cuba maintained solidarity with the North Korean regime, despite Pyongyang’s increased international isolation. Rodriguez justified his stance on the grounds that Cuban foreign policy is based on upholding just principles and resisting Western interference into the internal affairs of countries.
While leading North Korea expert Andrei Lankov interpreted these statements as proof that Cuba’s criticisms of U.S. imperialism would continue unabated despite the normalization, some NK News analysts have contended that Cuba’s show of support for North Korea may be more rhetorical than substantive. Cuba is mentioned only sporadically by the North Korean state media, and in a limited range of contexts. This suggests that the Obama administration’s Republican critics may have overblown the strength of the Havana-Pyongyang bilateral linkage.
Even if the extent of the relationship has been periodically exaggerated, Cuba’s September 2015 and May 2016 reaffirmations of an alliance with North Korea suggest that the ideological partnership remains alive and well. South Korean Foreign Minister Yun Byung-se’s visit to Cuba for the Association of Caribbean States (ACS) summit on June 4 and Seoul’s open calls for normalization with Cuba are unlikely to cause illicit trade between Cuba and North Korea to diminish or become more covert. This is because the symbolic significance of arms shipments and small-scale trade deals between the two countries still outweighs the economic benefits Cuba could glean from enhanced South Korean capital investments.
How Illegal Trade Persists Between Cuba and North Korea
Despite the immense international controversy resulting from Cuba’s 2013 arms sales to North Korea, sporadic trade linkages between the two countries have continued largely unhindered. In January 2016, Cuba and North Korea developed a barter trade system, which officially involved transactions of sugar and railway equipment.
According to Curtis Melvin, an expert at the Washington D.C.-based U.S. Korea Institute, barter trade is an effective way for Cuba and North Korea to evade international sanctions without depleting their hard currency reserves. Cuba’s use of sugar as a medium of bilateral trade has close parallels with Myanmar’s historical use of rice in exchange for North Korean military technology assistance. This form of trade has been vital for the North Korean regime’s survival in wake of the Soviet collapse and more inconsistent patronage from China.
While Cuba’s ability to use North Korean railway equipment remains unclear, NK News reported in January that Kim Jong-un was planning to modernize the DPRK’s railway networks, This development initiative could result in heavy industry production that can be bartered to Havana.
While trade in civilian goods between Cuba and North Korea appears to be on the upswing, trade in illicit arms continues to be the most symbolically potent and controversial form of bilateral trade. A 2013 Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI) report noted that a large number of North Korean arms brokers speak fluent Spanish. This language training demonstrates the importance of Cuba as a trade destination for the DPRK. The SIPRI report notes that Cuban arms dealers are especially attractive because they can deal with North Korea with a sense of impunity. This contrasts sharply with a British arms dealer who faced prison time in 2012 for purchasing North Korean weapons.
While the 2013 incident remains the most recent confirmed incident of weapons trading between Havana and Pyongyang, recent revelations of a lost U.S. Hellfire missile turning up in Cuba have sparked fresh concerns about a revival of the long-standing arms trade.
Cuba has consistently insisted that its arm shipments to the DPRK are for repair purposes, and therefore do not violate sanctions, which only ban one-way arms transfers. But Mary O’Grady of the Wall Street Journalrecently speculated that Cuba’s intelligence sharing and close cooperation with the DPRK constituted a highly pernicious blow to the prospects of U.S.-Cuba normalization.
While the Obama administration has removed Cuba from the state sponsors of terrorism list and taken a big stride toward lifting the Kennedy-era embargo on Cuba, Havana’s continued cooperation with Pyongyang is an alarming blow to the normalization process. The current linkage between anti-Americanism and the Cuban Communist Party’s regime security makes a shift in Havana’s North Korea policy unlikely in the short-term. It remains to be seen if Castro’s planned retirement in 2018 will take Cuban foreign policy in a more pragmatic direction, and allow South Korean diplomatic overtures to finally be successful.
Samuel Ramani is an MPhil student in Russian and East European Studies at St. Antony’s College, University of Oxford specializing in post-1991 Russian foreign policy. He is also a journalist who writes regularly for the Washington Post, Huffington Post and Kyiv Post amongst other publications. He can be followed on Facebook at Samuel Ramani and on Twitter at samramani2.