Cuba, Venezuela y Nicaragua presionan a EEUU con la migración, una herramienta de guerra, dice analista
Los regímenes totalitarios de Latinoamérica están presionando a Estados Unidos a través de la migración descontrolada en la frontera sur para servir a sus propósitos bélicos estratégicos, según un politólogo cubanoamericano, que explica cuál sería la solución a este problema.
El representante Carlos Giménez (R-FL) calificó la situación en la frontera como un “caos total” y denunció este lunes a través de su cuenta de X, antes Twitter, que los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua están presionando a Estados Unidos por medio de la migración.
Como ha venido informando The Epoch Times, los cruces ilegales han desbordado a las autoridades fronterizas en los últimos años. Mientras tanto, la CBP registró casi 335,000 detenciones de venezolanos, más de 200,000 cubanos y casi 138,00 nicaragüenses que intentaron cruzar ilegalmente la frontera en el año fiscal 2023. Eso sin contar los cruces que no son detectados por la patrulla fronteriza.
Solicitamos un comentario de la oficina de Giménez sobre sus declaraciones, y aún no recibimos respuesta.
Sin embargo, The Epoch Times en Español se puso en contacto con el politólogo Julio M. Shiling, autor y director de la publicación digital Patria de Martí, para conocer su perspectiva sobre la posible presión que pudieran estar generando estas dictaduras sobre el gobierno estadounidense.
Para la Cuba comunista y “sus neocolonias en Venezuela y Nicaragua”, la inmigración sirve para varios propósitos estratégicos fundamentales y uno de ellos es ejercer presión sobre Estados Unidos, según el analista.
Cómo están presionando las dictaduras
Una de las formas en las que se manifiesta esta presión con la migración es descontrolando la frontera. Las leyes migratorias “se están burlado totalmente”, dijo Shiling. Esto demuestra “que el control fronterizo de una nación queda totalmente quebrado”.
El demostrarle al mundo que Estados Unidos no puede controlar su frontera, está causando “un mal extraordinario” al país, indicó. Ya que queda expuesta para que diversos grupos puedan entrar “con total libertad”.
Pero esta presión no solo la viven las autoridades fronterizas, que no se dan abasto para procesar a un número tan grande de inmigrantes mientras enfrentan otros problemas como el tráfico de drogas y de personas, sino que también está impactando directamente a los ciudadanos comunes.
Shiling dice que la migración descontrolada impacta en los sueldos de los estadounidenses, ya que los inmigrantes ilegales tienden a buscar trabajo de forma subterránea, esquivando la ley y aceptando sueldos que están por debajo del mínimo permitido. Esto hace que los sueldos bajen para quienes trabajan de forma legal y afectan directamente a las minorías como los obreros afroamericanos.
“Muchos trabajos que dejan de existir, dejan de ser lucrativos para el obrero estadounidense”, explicó.
Inmigrantes ilegales suben sus pertenencias a un autobús después de aceptar la reubicación tras ser desalojados del Hotel Watson, en Nueva York, el 30 de enero de 2023. (Michael M. Santiago/Getty Images)
Otra de las formas en las que la sociedad americana está viendo esta presión es a través de la delincuencia y la violencia.
El analista señala que muchos fiscales de ciudades como Nueva York, Chicago o San Francisco —autodenominadas santuario— muestran una “enorme tolerancia” con este tipo de criminales. Recordó el incidente reciente de varios inmigrantes ilegales que fueron liberados luego de golpear a dos policías en la ciudad de Nueva York.
Sin embargo, menciona que existen ejemplos de personas que intentan defenderse cuando la policía no es capaz de ejercer su autoridad, pero tienen que enfrentar a la justicia.
Con qué propósito están usando la migración
“La lucha de clases por vía del uso de turbas que cometen crímenes es una herramienta de guerra”, explicó Shiling, “Estos grupos que están entrando con el auspicio de los regímenes dictatoriales —cubanos, venezolanos y nicaragüenses—, sirven a ese propósito lamentable”.
Además de ejercer presión sobre Estados Unidos, otro de los propósitos de la migración es influir en la política estadounidense, según Shiling. Ya que apunta a “fortalecer un electorado potencial” al impulsar medidas para que los inmigrantes puedan votar, estrategia que ha usado la izquierda en el pasado, explicó en entrevista con TV Libertad.
La inmigración también “es una forma de intentar colonizar a los Estados Unidos con personas que van a mandar remesas” a estos regímenes dictatoriales hundidos en la miseria que han generado sus líderes. Son “una fuente potencial de ingreso” en el caso de las personas que dejan a sus familias atrás, explicó el analista cubanoamericano.
Shiling también considera que la migración es para las dictaduras una herramienta social “para domesticar la población” en sus países. Esto significa que el saber que los ciudadanos de estos países tienen la forma de llegar a Estados Unidos “con la entrada casi asegurada, es una vía para pacificar ánimos contestatarios”, explicó.
Migrantes de Venezuela se arrastran a través de un agujero en el alambre de púas para cruzar a Eagle Pass, Texas, el 25 de septiembre de 2023. (ANDREW CABALLERO-REYNOLDS/AFP via Getty Images)
La migración puede constituir también “un mecanismo para destruir el concepto de nación” ya que apunta a la identidad del país, dijo Shiling a TV Libertad.
“Todo esto, es una base para quebrar los fundamentos de un Estado de Derecho, y coloca a estos regímenes dictatoriales como el cubano, el venezolano y el nicaragüense en posiciones de negociación muy efectivas, porque ellos van a aludir que ellos no tienen la culpa de lo que está ocurriendo, cosa que no es cierta”, aseguró Shiling.
The Epoch Times en Español solicitó un comentario a la administración Biden sobre las presunta presión de los regímenes latinoamericanos sobre Estados Unidos, pero no obtuvimos respuesta antes de la publicación de este artículo.
El problema tiene solución
Estos problemas relacionados con la presión de Cuba, Venezuela y Nicaragua usando la migración, representan una amenaza para Estados Unidos, no solo desde el punto de vista de la seguridad nacional, sino que también son un problema político y ético, según Shiling.
“Frenar esto es muy fácil y es ayudar a producir cambio de regímenes”, dijo.
Shiling asegura que buscar “vías de liberación” para Cuba, Venezuela y Nicaragua terminaría con la crisis migratoria en la frontera sur. Para él “no solo es una cuestión moral, es una cuestión consistente con los principios de los EE.UU.”.
Las declaraciones del representante Giménez sobre el papel de las dictaduras latinoamericanas en la migración surgieron justo cuando los republicanos están pidiendo un impeachment contra el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, por su gestión de la crisis migratoria en la frontera sur.
Autora: Cristina Bazán, REPORTERA-THE EPOCH TIMES EN ESPAÑOL. Siga a Cristina Bazán en X: @cristinaisbe