Comentario sobre las relaciones de Cuba-UE publicado en el Latin America Advisor, la publicación del Inter-American Dialogue el 19 de septiembre 2019. El comentario es en inglés pero también aparece una traducción al español ►.
Where Are Europe’s Ties With Cuba Headed Next?
Julio M. Shiling, director of Patria de Martí: “The European Union, under the stewardship of Federica Mogherini, is charting a course with Cuba that undermines democracy and human rights. Cuba has a nondemocratic, single-party regime with a Leninist state, a communist ideology and the monopolistic control of the relevant factors of production and media communications. It suppresses free speech and has no rule of law. The European Union’s position, as evidenced by Mogherini’s visit, is that of engagement focusing on economic development on the island and defense of European commercial interests. There is a resemblance to the détente/engagement principle rationale that the European Union is displaying toward Cuba and the U.S. focus on China that began in the 1970s. China, no doubt, has fared well economically, but democracy is nowhere in sight. Yet, that same underlying premise sustains the European Union’s position toward Cuba. Economic development, part of the modernization theory supported by political sociologists such as Seymour Martin Lipset, has not worked in regimes such as those in China and Vietnam.
Why would the European Union expect Cuba to be an anomaly? If the goals were to foster a coherent policy that recognizes the need for a democratization process to begin in Cuba, then the European Union would prioritize the respect for human rights and espouse a basic standard of conduct for the Cuban regime to follow with its people. The European Union has not done this. Quite the contrary. Its policy will only solidify dictatorial rule and enrich a few politically connected families. Cubans deserve better.”
Traducción al español:
Julio M. Shiling, director de Patria de Martí: "La Unión Europea, bajo la administración de Federica Mogherini, está trazando un curso con Cuba que socava la democracia y los derechos humanos. Cuba tiene un régimen no democrático, de partido único con un Estado leninista, una ideología comunista y el control monopolístico de los factores de producción relevante y los medios de comunicación, la libertad de expresión es suprimida y no existe un Estado de derecho. La postura de la Unión Europea, como ha quedado demostrado con la visita de Mogherini, es la del acercamiento enfocándose en el desarrollo económico en la isla y la defensa de los intereses comerciales europeos. Hay una similitud en el principio racionalizado de la política de distensión/acercamiento mostrada por la Unión Europea hacia Cuba y el enfoque político de los EE UU hacia China que comenzó en la década de 1970. A China, indudablemente, le ha ido bien económicamente, pero la democracia aún no está a la vista. Sin embargo, esa es la misma premisa subyacente que sostiene la política de la Unión Europea hacia Cuba. El desarrollo económico, parte de la teoría de la modernización sostenida por sociólogos políticos como Seymour Martin Lipset, no ha trabajado en regímenes como los de China y Vietnám.
¿Por qué piensa la Unión Europea que Cuba sería una anomalía? Si los objetivos fueran trazar una política coherente que reconozca la necesidad de comenzar un proceso de democratización en Cuba, entonces la Unión Europea daría prioridad al respeto por los derechos humanos y formularía un estándar de comportamiento elemental que rija al régimen cubano en su trato con el pueblo. La Unión Europea no ha seguido este curso. Todo lo contrario. Su política solo consolidaría el poder dictatorial y enriquecería a unas pocas familias que están bien conectadas con el régimen político. Los cubanos se merecen algo mejor ".