A mitad de la tarde de este miércoles, alrededor de unos quinientos residentes del municipio Cerro salieron a protestar a la popular calzada de 10 de octubre para exigir el restablecimiento del servicio eléctrico, el agua, la recogida de basura y escombros acumulados en días.
Según el testimonio de vecinos y trabajadores de la zona, la policía cerró la calzada desde su intersección con Santa Catalina hasta la esquina de Toyo, lugar más cercano de la protesta pública.
Una trabajadora de la panadería Silvain, en la esquina de Toyo, contó:
“Llegaron cinco camiones de la Brigada Especial y los carros de policía cerraron desde aquí (Toyo) hasta Santa Catalina, donde dicen que también había gente en la calle (…) Con ellos venía el General que los paró, porque venían a llevarse presa a la gente”.
La testigo narró que cuando los demandantes comunicaron sus exigencias a las autoridades, en pocos minutos llegaron camiones de Servicios Comunales y sanearon la zona.
“Fueron más de diez camiones”, comentó a este reportero una vecina del lugar, y agregó: “Lo más irónico es que cuando dijeron que iban a traer pipas de agua, ellos (los protestantes) dijeron que no, que querían el agua en las casas. No pasó media hora y llegó la luz y el agua. Este pueblo es bueno”.
Dos horas después de los sucesos, se fue restableciendo el servicio en el resto del municipio Cerro, en los barrios que rodean a la avenida Monte.
El restablecimiento del servicio eléctrico no se ha completado en la ciudad, después del paso del huracán Irma. El gobierno admitió que tomaría tiempo, lo que mantiene irritada a la población.
En estos momentos la calzada de 10 de octubre se encuentra custodiada por la policía motorizada. CubaNet constató que un jeep de la policía repartía comida a los gendarmes apostados en la vía, lo que indica que la vigilancia se mantendrá de forma prolongada.
Después de paso del huracán Irma, en las calles de La Habana se han dejado ver las fuerzas de la Brigada Especial Nacional, conocidas como boinas negras, brigadas de prevención y militares patrullando las calles.
La población reconoce un ambiente enrarecido por la molestia, sobre todo en las zonas del Vedado y Cerro, donde se acumula la basura y se mantienen los escombros dejados por Irma.
Por Augusto César San Martín Cubanet